El presidente de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), magistrado Henry Molina, sostuvo este jueves que la nueva promoción de aspirantes a jueces y juezas que ingresa a la Escuela Nacional de la Judicatura (ENJ) debe estar preparada para enfrentar los desafíos actuales, adaptarse a las cambiantes dinámicas del presente y estar en sintonía con las necesidades de las personas a las que sirven.
“Nuestras juezas y jueces tienen el reto de alimentar un paradigma, un nuevo espíritu de servicio, con hondas raíces en el mandato constitucional y en el compromiso republicano ante valores esenciales para la convivencia”, expresó el también presidente del Consejo del Poder Judicial (CPJ).
El magistrado Molina se expresó en esos términos durante el acto de ingreso a la ENJ de la nueva promoción de aspirantes a jueces que cumplió de manera satisfactoria con el concurso de oposición correspondiente al año 2022, el cual fue reforzado con rigurosas evaluaciones de estándares internacionales.
Dijo que es su sincero deseo que cada una y cada uno pueda llevar con honra la dignidad de actuar y decidir en nombre de la República.
Sostuvo que el Poder Judicial va más allá de los expedientes, procedimientos o doctrina, para priorizar la dignidad de las personas, lo que consideró tiene enormes implicaciones humanas, jurídicas, sociales, técnicas e institucionales.
“Pero, sobre todo, debe tomar en cuenta la integridad, la ética y la transparencia, que son exigencias legítimas de la sociedad, pero también cualidades indispensables de quienes tenemos en nuestra responsabilidad decidir sobre los bienes y vidas de las personas”, señaló el magistrado Molina.
Asimismo, explicó que al completar la etapa de formación (24 meses), estos se convertirán en la primera generación de juezas y jueces plenamente formados con un nuevo enfoque: “el de un Poder Judicial comprometido con poner a las personas en el centro de cada una de sus acciones”.
De su lado, la magistrada Pilar Jiménez Ortiz, jueza presidenta de la Primera Sala de la SCJ y egresada de la primera promoción de aspirantes a jueces tuvo a su cargo las palabras de bienvenida, y aseguró que el programa es una experiencia que trasciende las aulas y moldea a quienes tienen la oportunidad de participar en él.
“Es mi responsabilidad compartir con ustedes, aspirantes a jueces y juezas, una recomendación que espero les sea de utilidad en este trayecto que hoy inician: este programa será difícil, sin duda, pero es precisamente esa dificultad la que les permitirá forjar su carácter y prepararse para las responsabilidades que asumirán como futuros jueces y juezas; no teman a los retos, abrácenlos como oportunidades de crecimiento, aprovechen cada enseñanza y cada experiencia, y nunca olviden lo más importante: están aquí para servir a la justicia y a las personas que dependen de ella”, puntualizó la también segunda sustituta del presidente de la SCJ.
Mientras que el director de la ENJ, licenciado Ángel Brito, valoró la capacitación que reciben los aspirantes a jueces a través del programa de formación, responsabilidad establecida en la Constitución de República Dominicana. Asimismo, explicó los cuatro ciclos que abarca el programa a través de los cuales forjaran las competencias que les permitan ser el nuevo juez (a) que espera el Poder Judicial, enfocado en una cultura de eficiencia, transformadora y de datos.
La promoción de aspirantes a jueces
Los ocho aspirantes que superaron el concurso son: María Alejandra Polanco Aguasvivas, Rikelmigh Padilla Bear, Víctor Gabriel Cuevas Cruz, Klarens Andreina Parra Cerda, Prairie Ugolina Ruiz Sánchez, Michael Antonio Hernández Quezada, David Antonio Sánchez Merán y Yorvy Sáchez, quienes deben completar un programa de formación con una duración de poco más de dos años.
El pasado año 2022, la Dirección General de Administración y Carrera Judicial, como órgano responsable, según lo indica la Ley de Carrera Judicial, núm. 327-98, y su Reglamento de Aplicación, convocó a concurso para ocupar las plazas vacantes de jueces y juezas en los distintos Departamentos Judiciales. Las vacantes se producen luego de los ascensos realizados en 2021 y 2022 por el Consejo del Poder Judicial (CPJ).
